Salmo 56
Para el principal creador de música; sobre la paloma silenciosa en paraje muy distante.Mictam de David. Cuando los filisteos lo llevaron a Gat.
Ten piedad de mí, oh Dios, porque el hombre está intentando destruirme; todos los días hace crueles ataques en mi contra.
Mis enemigos están siempre listos para darme fin; muchos son los que me atacan con altanería.
En el tiempo de mi temor, confío en ti.
En Dios daré alabanza a su palabra; en Dios he puesto mi esperanza; No tendré miedo; qué puede hacerme el hombre?.
Todos los días me hieren con palabras; todos sus pensamientos están en mi contra para mal.
Se juntan, esperan en lugares secretos, toman nota de mis pasos, esperando el momento de matarme.
Por su propia maldad no se librarán del castigo. En tu ira, oh Dios, que los pueblos sean humillados.
Tu llevas en cuenta mis huidas; tú recoges cada una de mis lágrimas; ¿no están en tu registro?
Cuando envío mi clamor a ti, mis enemigos serán vueltos atrás; Estoy seguro de esto, porque Dios está conmigo.
10 En Dios daré alabanza a su palabra; en el Señor daré alabanza a su palabra.
11 En Dios he puesto mi esperanza, no tendré temor; que puede hacerme el hombre?.
12 Guardo el recuerdo de mi deuda contigo, oh Dios; Te daré las ofrendas de alabanza.
13 Porque has librado mi alma del poder de la muerte; y que mis pies cayeran, para poder estar caminando delante de Dios en la luz de la vida.